jueves, 10 de febrero de 2011

Del Tiempo.

Ya no busco trascender ni ser ejemplo de nada, solo quiero escribir…
Eh llegado a una frontera donde los senderos se bifurcan y a ciencia cierta no se cual tomare, pero no dejare de caminar por que si no camino me alcanzo.

Soy un buscador de relámpagos con demasiadas madrugadas a oscuras.
Soy una pésima inversión a futuro.
Soy un demonio de bajo perfil y he de hablar el idioma de los ángeles.
Me aburren los domingos soleados, me eh especializado en cosas demasiado inútiles.
Colecciono frases de canciones, como si eso le diera sentido a mis días.

Me ahogo en silencios y me sobran pretextos.
Mi vida es un montón de referencias que a muchos no les dicen nada, el aroma de muchas ausencias, la cicatriz en mi ceja izquierda, el odio de aquella amante olvidada, y el miedo a que los años me vuelvan más duro.

Tengo ojos de diablo y espíritu (bondadoso, blando), pero las sonrisas me son escasas.
Soy especialista en levantar barricadas contra los ataques de la tristeza, en cavar trincheras para detener los pensamientos suicidas.

Soy un neurótico, ansioso, voluble y demasiado imperfecto...
Pero tengo besos que saben a fuego...

He conseguido una que otra victoria y he sido derrotado por demasiadas soledades.

“VICTORIA y SOLEDAD/FILOSOFIA y REALIDAD”.

Puedo vivir con muy poco, eh logrado sobrevivir con menos.

Me alcanza con los rezos de mi madre, el amor de mis sobrinos, el cariño de mis amigos, los besos que eh dado, el fuego que me quema en mis noches de delirio, los sueños que no he empeñado, el escaso talento que me salva de ser un idiota, la promesa de luna mujer que llegara tarde o temprano.

He construido una fortaleza que me protege de los enemigos que nunca estarán a mi altura.
Soy un mal hijo, un pésimo hermano y peor tío.

Quiero morir satisfecho de mí.
Así que aun no está cerca el momento...

Cantar en la regadera me hace sentir patético, hablar con el espejo es un ejercicio cotidiano.
Me odio por ser tan duro y me maldigo por llorar en silencio...
Me quemo por dejar este infierno y mis bestias aúllan si no las alimento.

Demasiada poesía para un tipo tan poco romántico.

Tengo un mensaje en el buzón de mi cel...
Ees mi propia voz y suena extraña.
Es un consejo que nunca atiendo...
Tengo frio y tengo sueño, tengo anhelos y me falta afecto.
Soy un corazón en el congelador.
Soy un idiota, un pen… y aun así me quiero.

Soy autentico y soy patético, no quiero pastel de cumpleaños, me basta con un abrazo, con que alguien me recuerde, con los rezos de mi madre y la mirada de mis sobrinos y la sonrisa de mis escasos amigos.

Esta noche festejare que no eh vendido mi alma, que no he empeñado mi dignidad, ni he besado los pies de nadie.

Soy todo espíritu, soy la rabia de mi adolescencia, la alegría de mi niñez, el equilibrio de mi supuesta madurez y la locura de todos los Danieles que hay en mí.


Esta noche me repetiré la misma mentira diaria…

“La juventud se resiste a abandonarme”.

lunes, 31 de enero de 2011

Y abrí las manos...

Abrí las manos
Recuerdo de Fuego...
Dolor que ahora solo cuenta en uno, arrastrándolo a un infierno
Condena eterna.
Y gracia da castigo semejante a un inmortal...
El daño que causa una sonrisa a un ser arropado por brazos de mil rostros.
Un sentir que jamas se equiparara con el que olvida
Mas todo responde a la contradicción que se puede gestar al amar
Sufrir en el fuego?
es costumbre que no deseo compartir...
Difícil decisión que en cada reencarnación repetiría.
Siempre con mil lagrimas pero la misma sonrisa
No me arrepiento
Tu eres feliz lejos de mi
y si
YO ABRÍ LAS MANOS...